Un hotel por abrir se llena de ocupas.

En el 250 de la avenida Meridiana de Barcelona, un edificio que estaba a punto de abrir como hotel en el 2010, y que nunca abrió, se llena de ocupas. El lunes se da la alarma ya que uno de los ocupas muere por sobredosis. Hace meses que los vecinos se quejan de los olores, suciedad y molestias, pero esto son también consecuencias de la crisis que nos golpea. La situación legal de un edificio en estas condiciones es complicada. La propiedad si tiene problemas económicos, no puede abrir el hotel, la policía no puede entrar en una propiedad privada sin permiso de la propiedad, y la propiedad vera cada vez más difícil recuperar no solo el edificio, sino su estado inicial para su posible apertura. Pero la ciudad acusara esta degradación. Este momento de crisis debería ser aprovechado para plantearnos todo nuestro sistema, el cual muchas veces nos conduce a situaciones conflictivas, e imposibles de solucionar. El sistema que te lleva a estos callejones sin salida, no es sistema.